te conseguirás una muñequita,
de esas que siempre soñaste tener,
una mujercita bien peinada, que vaya al estilista cada fin de semana,
a quejarse de la vida que le ha tocado a tu lado, pero aprovechando de
cada centavo.
Te conseguirás una muñequita de las que se maquillan muy bien su cara,
pero que no tienen idea como delinear su alma,
tan linda, tan tonta, tan sola
una mujercita que dependa de ti, de tu dinero,
que se vista bien y conserve su belleza para que no la dejes.
Te conseguirás una muñequita a la que sea fácil engañar,
que no sea necesario dar explicaciones mayores,
solo un beso en la frente y unos cuantos dólares mas,
una mujercita, que no le importe donde estás
mientras le traigas un regalo y ante de acostarte
te vayas a duchar.
Conseguirás esa muñequita, casi tan fácil como parpadear,
la vida tiene un montón de ellas, esperando que alguien,
no importa la cara, pero las pueda rescatar,
de la ineptitud, la brutalidad, y sobre todo que aseguren
su economía con tu capital.
Encontrarás una muñequita que no conoce un orgasmo
y a tu lado jamás lo conocerá, se aburrirá con el tiempo
del sexo y terminará por decirte ante de hacerlo que
los dolores de cabeza no permiten ni moverse.
Te conseguirás una mujercita, no una mujer, sino
una mujercita que apenas aprendió a serlo
planchando su cabello y encontrando el equilibrio
cuando aprendió a andar en tacos.
Es posible que seas feliz, que a la final te acostumbres
a que la vida no sea nada mas,
va a ser un hombrecito, no un hombre de verdad.
Y yo, soy la mujer, la que no tuviste idea de como amar,
la que esperó, y soportó, pero hoy se va,
a seguir el verdadero camino sin ningún otro capricho
que aguantar.